Casi cuatro años después de que el alcalde Carlos López diseñara su plan para construir Ojo de Agua, el primer hotel municipal en el centro de Rincón, el municipio aún no ha conseguido nuevos fondos, públicos o privados, para terminar su construcción, pero afirma que lo hará antes del verano de 2020. Mientras tanto, los detractores cuestionan la necesidad de otro hotel en el pueblo y sugieren darle otro uso a su estructura.
En septiembre de 2015, el alcalde de Rincón, Carlos López, colocó la primera piedra de lo que se convertiría en la respuesta de su gobierno a la creciente demanda de habitaciones en la industria turística, el hotel boutique Ojo de Agua, en pleno centro de Rincón. Con un presupuesto de $3.2 millones, la mayoría de los cuales provenían de un emprestito municipal del Banco Gubernamental de Fomento (BGF), López encargó a GA + NF, una firma de arquitectos de Coamo, que le diera nueva vida a la economía del centro del pueblo con un edificio moderno.
Una vez terminado, este nuevo hotel tendría 16 habitaciones, un restaurante, un salón de eventos, tiendas y una piscina. Incluso, antes de terminado, la Compañía de Turismo de Puerto Rico (TCPR) había añadido el hotel a sus "Posadas", una iniciativa destinada a diversificar la oferta turística de la isla. Sin embargo, casi cuatro años después, el hotel es sólo un esqueleto de hormigón abandonado y deteriorado, que muchos en la comunidad consideran dificil de mirar.
Según dicta una ordenanza municipal reciente, la primera fase de la construcción terminó un año y $1.12 millones después de que López colocó la primera piedra. Todo parecía estar en orden cuando su segunda y última fase comenzó en octubre de 2016, pero se detuvo abruptamente cuando el contratista cesó operaciones debido a un impago del municipio en marzo de 2017.
Para entonces, el BGF, que una vez fue el principal ente fiscal del Gobierno, había perdido su capacidad para desembolsar estos préstamos y necesitaba desesperadamente reestructurar su propia deuda después de fallar en identificar nuevas fuentes de solvencia, según indica su ley de reestructuración firmada unos meses después de haber dejado en suspenso el propuesto hotel de Rincón.
Desde entonces, Rincón ha intentado, sin éxito, encontrar fuentes alternativas de financiamiento para completar el hotel. Según su administrador municipal, Francisco Mercado, quien comentó sobre el asunto durante la sesión ordinaria de marzo de la Legislatura Municipal, el gobierno estatal, inversionistas individuales e incluso cooperativas de ahorro y crédito, incluyendo a COOP Rincón con sede a una cuadra del hotel propuesto, han rechazado la oportunidad de inversión.
Juan Carlos Pérez, portavoz del alcalde, dijo a A Rinconvenient Truth que, en el pasado, la administración municipal había buscado un préstamo para finalizar el proyecto, pero que la banca privada se mostraba reacia a financiarlo. Ahora, bajo la medida recientemente aprobada, el alcalde está enfocado en encontrar nuevos inversionistas que rediseñen el hotel, si es necesario, terminen de construirlo y lo operen por un plazo de 30 a 40 años.
La Ordenanza #15, firmada por el alcalde en marzo, le permite a su oficina solicitar nuevas propuestas de desarrollo para Ojo de Agua a través de una solicitud de propuestas (RFP), lo que Mercado esperaba que ayudara a Rincón a atraer nuevos inversionistas dispuestos a terminar de construir el hotel.
Sin embargo, más de tres meses después de su aprobación, aún no se ha emitido la solicitud de propuestas.
La alcaldía afirmó que está en conversaciones con varios inversionistas, pero rechazó repetidas solicitudes para conocer los nuevos términos, si los hay, que la administración cree que atraerían a los inversionistas ahora, a diferencia de los que han rechazado previamente financiar el proyecto.
"Ya hay varios interesados con experiencia en la industria hotelera y, desde el principio, el proyecto tenía como objetivo ser una entidad público-privada. Actualmente estamos evaluando propuestas y discutiendo negociaciones, esperamos que el proyecto vuelva a estar en construcción dentro de un año", aseguró Pérez.
Cuando se le presionó para obtener detalles sobre estas supuestas negociaciones, el portavoz del alcalde afirmó que no sabía los nombres de los posibles inversionistas.
Otros líderes comunitarios no ven la necesidad de un hotel municipal
En el año 2015, cuando el alcalde decidió emprender con el hotel municipal, lo hizo a partir de las sugerencias de la Compañía de Turismo. Este último, dijo su portavoz, había realizado un estudio, basado en las firmas de los visitantes, entre 2006 y 2007, que demostró que Rincón necesitaba un estimado de 500 habitaciones adicionales para apaciguar la demanda de alojamiento en la próxima década (2010-2020).
Este medio contactó a Waleska Pérez, asistente de la directora de la Oficina de Turismo de Rincón, quien no tenía conocimiento del supuesto estudio. Sin embargo, dijo que su oficina realiza inspecciones visuales periódicas y ha estimado que la infraestructura de alojamiento de Rincón fluctúa entre 70 y 80 instalaciones hoteleras, excluyendo un número creciente de Airbnbs emergentes.
"Sería casi imposible para mí hacer valer un número específico de habitaciones disponibles. Cuando hay un gran evento como un importante concurso de surf o para unas vacaciones importantes, es natural que los lugares estén completamente reservados. Sin embargo, aparte de eso, tengo entendido que aquí en Rincón tenemos suficiente alojamiento para acomodar a los visitantes en cualquier momento", explicó Pérez sobre la evolución de la infraestructura de turismo en Rincón durante los últimos cuatro años.
Asimismo, Sandra Caro, propietaria de Villa Cofresí, uno de los hoteles más antiguos de la ciudad, cuestionó recientemente la necesidad de otro hotel en la zona. "Ahora, para el 4 de julio, estamos a pleno rendimiento, pero después del fin de semana, pasamos por un período más lento. Es importante tener en cuenta que la gente viene a Rincón por diferentes razones e intereses individuales. En cuanto al Hotel Ojo de Agua, me entristece ver esa fea estructura inacabada que cubre lo que una vez fue un histórico manantial de agua natural. Estoy a favor del turismo, pero no puedo decir que otro hotel sea necesario", agregó.
Para la legisladora municipal Bethzaida Bonet, las dificultades que el proyecto a experimentado para encontrar nuevas inversiones es una señal de que el futuro del hotel es altamente incierto y que su inicio fue equivocado.
"Aquí (apuntando hacia su teléfono celular) tenemos aproximadamente 1,000 listados locales de Airbnb. Un nuevo hotel sólo llevaría a los huéspedes lejos de los hoteles existentes. Todo el dinero invertido podría haber sido utilizado en otros proyectos de mayor necesidad", añadió la legisladora.
En cuanto a los proyectos que requieren mayor atención, Manuel González, líder comunitario y fundador de la organización Rincón x Rincón, planteó la posibilidad de utilizar la estructura para atender las necesidades de las personas mayores, que constituyen casi una cuarta parte de la población de la ciudad (24,4%, residentes de 65 años o más), según las últimas estimaciones de la Oficina del Censo de Estados Unidos. "Estando tan cerca de un hospital, en lugar de un hotel, podría haber sido un hogar de ancianos", sugirió González.
A Rinconvenient Truth solicitó entrevistas con el alcalde durante más de un mes para discutir este asunto, pero no recibió confirmación antes de que se publicara esta historia.